Algo más que un bar en mucho más que un teatro.

Las buenas costumbres de la mafia

"Si el caviar y el salmón formaban parte de su menú habitual, la pasta a las sardinas era para Lucky Luciano su magdalena de Combray. A la hora de cocinar, el capo Lucky era todo lo contrario a un aficionado y respetaba las tradiciones de la Terra Nostra.
Los mafiosos saben gozar de los placeres del momento sin preocuparse por el día siguiente. Es cierto que físicamente están preparados para estos banquetes y que, como rudos campesinos que son, dejan para el día del juicio final la subida del colesterol y los ataques de gota, aunque no pueden librarse de unos kilos de más".



La mafia se sienta a la mesa. J. Kermoal y M. Bartolomei
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1 comentario:

  1. SI COMPARTO. AGUANTE LA MAFFIA. CUANDO ERA CHICO ME PREGUNTABAN QUE QUERIA SER Y RESPONDIA: "QUIERO TENER UNA MAFFIA..."

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